Nº2 LA CONSTRUCCIÓN DEL MUNDO COMIENZA CON BET




La Torah comienza con esta letra, y es la primera letra de la palabra Bereshit (En el Comienzo) que le da título al primer Libro que conocemos en Occidente como Génesis. La BET marca el inicio de algo, ese algo a partir de nada según vimos en la letra ALEF y el Vacío. Específicamente y en términos geométricos lo que indica es el comienzo de una línea recta, un límite superior e inferior que expresa anchura, expansión pero al mismo tiempo es la primera restricción necesaria para formar el mundo físico de la materia. Ahora hay una Expansión, se intuye que es algo cuya anchura posee dirección o sentido, movimiento hacia adelante (comienza en la derecha y va hacia la izquierda como la escritura hebrea, como el movimiento del sol y casi todo lo conocido). Por eso se dice que primero estaba el Vacío y luego el Infinito, porque la primera limitación de la Nada es la cualidad de No Tener Fin. Seguramente esta ha sido también la razón por la cual esta letra BET fue designada para nombrar la palabra Casa, pues es el boceto de lo que luego sería el hogar del Ser Humano, la fase uno del proyecto. Y es la primera letra de la Gran Revelación Divina: la Creación, relato en el cual se cuenta que El segundo día (segunda letra) Dios dividió las aguas que estaban sobre la expansión de las que se hallaban debajo de la expansión (aguas superiores e inferiores, cielos y mares). Finalmente y como dato complementario, al unir las dos primera letras (alef bet) obtenemos la palabra Padre, Antepasado, Originador, Brote. Todo nos sigue dando una idea similar a las anteriormente enunciadas.
La construcción de nuestro mundo comienza con BET.

CASA
Reconocer que esta vida que vivimos es todo lo que tenemos, el mundo es nuestro lugar, el entorno inmediato no elegido (familia, compañeros de estudio o trabajo, etc) cumplen una función muy importante y no debemos renegar de ello sino más bien comprender y atender. El entorno inmediato es un espejo de las complejidades humanas, cuanto más cercano a nosotros mayor su importancia para nuestros desarrollo interior. La Casa como Hogar es también un objetivo permanente pues solo cuando creamos un espacio propio o alejado de los antepasados biológicos, es cuando descubrimos lo que somos capaces de construir hasta ese momento, vemos lo que tenemos y hemos logrado para nuestra evolución; se entiende entonces como una suerte de metáfora sobre lo que somos o hemos estado persiguiendo, nuestra situación actual y el nivel de perfeccionamiento alcanzado.

TEMPLO
Es una casa de meditación, un lugar de contacto interno, de conexión interna. El mundo exterior y los eventos no pueden captar toda nuestra atención porque acabaríamos perdidos en deseos y reglas ajenas, por eso es necesario un constante regreso hacia adentro para meditar sobre las experiencias recogidas y cómo nos comportamos y enfrentamos esas situaciones. Recuerden que este mundo físico no se arregla por sí mismo sino por la acción individual en suma: no hay otra manera de conocer nuestro destino y estado presente sin una constante revisión interna.

INTUICIÓN
Así como el ALEF es masculino, la BET es femenina. Esta cualidad se refiere a la inclinación natural de ser más receptivo, internalizador, menos deductivo y más intuitivo. También de relaciona con la clarividencia y el mundo de lo esotérico, lo oculto. Solemos poner énfasis en el hecho de que la mujer posee mayor sensibilidad que el hombre: efectivamente, el hemisferio derecho (el mismo lado del comienzo de la expansión de la letra) está más desarrollado, la capacidad lógica disminuye para darle paso a la inteligencia emocional. Hoy en día ya no es terreno exclusivo de un sexo puesto que la humanidad está atravesando un período de gran asimilación y concentración de la dualidad inherente en todo. Recordemos que el cerebro humano estaba dividido en dos y hoy es un mismo órgano (hace aprox. 2500-3000 años), la igualdad de género o su multiplicidad con sus consecuentes marcos jurídicos-sociales ha acortado la brecha histórica. La intuición permite un acceso al aprendizaje, sabiduría y contacto interior mucho más rápido  fluido y ello nos ayuda a dar grandes saltos evolutivos. Es vital prestar especial atención al desarrollo de nuestro hemisferio derecho. Es la gran Labor humana y tecnológica hacia el futuro de la civilización.

DUALIDAD
Luces y sombras, el Bien y el Mal. Tenemos que reconocer que en todas las cosas y eventos existen estas dos manifestaciones que generan contraste y llevan al entendimiento. Se halla en nuestra manera de actuar, de vivir el mundo. Comprendemos por oposición de contrarios, es la manera más simple de deducción y hasta ahora la más efectiva. La duda, la restricción, las incomodidades y obstáculos son parte indispensable para alcanzar el objetivo del correcto proceder, el camino del medio, el modo justo. Una luz brillante es detectada gracias a la presencia de oscuridad. Vale decir que sería disparatado pretender una vida de satisfacción permanente porque nos estancaríamos. ¿Quién es capaz de avanzar, de preocuparse por el Bien o considerar la existencia de la problemática del otro mientras se vive en una burbuja de felicidad? Imposible no caer en el egoísmo y la insensibilidad. Sin dolor no hay Misericordia. Sin Misericordia no hay lugar para el Amor y la vida justa de todos los componentes de este Cielo llamado Tierra.

EXPANSIÓN
Todo nace desde adentro. El útero desarrolla la vida por venir, el comportamiento íntimo modela nuestra relación con el mundo, el otro existe como persona humana cuando soy capaz de verlo. Los eventos de nuestra vida son más que el resultado de la famosa ley kármica según la cual todo lo que hacemos vuelve a nosotros como si de un boomerang se tratara; si todo vuelve, si todo es causa y efecto sucede así porque hay una primera gestación interna, individual y privada. Aquellos que deseen realmente cambiar sus vidas deben comenzar por realizar las correcciones necesarias a nivel interno y lo demás vendrá por añadidura.

LA DERECHA
El secreto que nos revela la letra BET es que la línea superior y la inferior se unen por la derecha, el lado de la Sabiduría, la Misericordia y la expresión emocional. Así aparece en el Árbol de la Vida esta columna o pilar derecho, estas son las dimensiones que dicho pilar atraviesa. Es la única manera de unir lo trascendente que hay en nosotros, ese rasgo de divinidad que nos caracteriza sobre cualquier especie creada en este mundo. Son tres atributos internos que motorizan correcciones fundamentales a nivel externo: la Sabiduría es la fuente de un correcto modo de pensar, la Misericordia es el principio del Amor y las emociones nos llevan a relacionarnos. Relacionarnos para amar y saber hacer. La sanación más poderosa a nuestro alcance llega desde la derecha. Este es el comienzo de toda gran Labor humana.

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